domingo, 7 de septiembre de 2014

LA ORACION NOS AYUDA A PROSPERAR COMO CRISTIANOS
Hoy en día todos buscamos ser prósperos, pero la prosperidad no solo son bienes materiales sino también llenar  el corazón del poder  y la gracia de Dios, es ser acepto  en el bien Amado, esto quiere decir que el que yo crea y ame a Cristo es suficiente para que Dios me acepte.  En Efesios 1:4 dice que desde la eternidad Dios nos preparó para estar sin mancha ni arruga en la presencia del Padre .  Ahora que sabemos esta verdad, debemos enfocarnos en pasar  mucho tiempo ante la presencia del Padre por medio de la oración.
Orando y Caminando
La vida cristiana  no es sólo entrar en un camino, entrar en la Iglesia o alguna denominación; la vida cristiana es aprender a caminar por donde Dios desea que usted camine, porque Dios siempre quiere darle lo mejor.  La forma más rápida de conocer cuál es mi camino como creyente es: orando para que el Padre se  revele a su corazón.
Cuando una persona encuentra el buen camino siempre tendrá prosperidad, aunque a veces este camino es estrecho  vale la pena estar en él porque Dios nos concede muchas alegrías que  el mundo no nos puede dar.  Orando debemos pedirle a Dios que nos ponga el deseo de estar en el  buen camino porque si no el alma querrá  hacer  otras cosas, como por ejemplo estar en el chisme, en las bebidas, en las fiestas, desatención de la familia, etc.
El camino de la gracia nos enseña que la prosperidad ya  nos la ha sido dada, porque todo el que tiene a Cristo lo tiene todo.
Orando y Prosperando
La prosperidad del alma es algo muy importante en cada uno, porque el espíritu es perfecto, es una sola ofrenda al Señor,  el poder de Dios se manifiesta superando la carne (que es el alma.)  Dicho en otras palabras cuando la carne comienza a tomar actitudes espirituales y mi alma se parece al espíritu es cuando la santidad de Dios brilla en cada uno de nosotros,  y empezamos a ser vencedores en toda situación.
Lucas 5: 4-11 dice: Cuando Jesús terminó de enseñarles, le dijo a Pedro:  —Lleva la barca a la parte honda del lago, y lanza las redes para pescar.  Pedro respondió:  —Maestro, toda la noche estuvimos trabajando muy duro y no pescamos nada. Pero, si tú lo mandas, voy a echar las redes.  Hicieron lo que Jesús les dijo, y fueron tantos los pescados que recogieron, que las redes estaban a punto de romperse.  Entonces hicieron señas a los compañeros de la otra barca, para que fueran enseguida a ayudarlos. Eran tantos los pescados que, entre todos, llenaron las dos barcas. Y las barcas estaban a punto de hundirse.  Al ver esto, Pedro se arrodilló delante de Jesús y le dijo: Señor, apártate de mí, porque soy un pecador! .   Santiago y Juan, que eran hijos de Zebedeo, Pedro y todos los demás, estaban muy asombrados por la pesca tan abundante. Pero Jesús le dijo a Pedro:   —No tengas miedo. De hoy en adelante, en lugar de pescar peces, voy a enseñarte a ganar seguidores para mí.  Los pescadores llevaron las barcas a la orilla, dejaron todo lo que llevaban, y se fueron con Jesús.”
Pedro que era un experto en la pesca  pero se deja guiar por Jesús ya que por el camino que él había seguido no habían pescado nada, Pedro  decide obedecer  a Jesús y sin oposición toma el camino que Jesús le dice.  Aquí el Señor nos está enseñando que cuando tenemos la actitud de obedecer al Señor nuestra alma tomará el buen camino y prosperará.
Pedro venció  su alma, renunció a sí mismo, con su actitud de obediencia a lo que Jesús le dijo se declaró principiante siendo él un experto en la pesca, Pedro tomo el buen camino y por ello las barcas casi se hunden de tantos peces que pescaron, eso es prosperidad.  Hoy en día prosperidad es también pescar hombres y mujeres para Cristo utilizando nuestro proceder en el buen camino, porque muchas veces la predicación no llega al corazón de las personas   pero el buen ejemplo los convence.
Los minutos y las horas en oración nos lleva al camino correcto y a la prosperidad anhelada.  La familia que ora unida tiene gran bendición. 
Como intercesores estamos comprometidos en en ayudarte a encontrar el camino correcto en tu vida.  Escríbenos tus peticiones de oración a: ministeriodeintercesionbh@gmail.com